En logística, cada metro cuadrado cuenta. Sin embargo, muchas empresas en México pagan mes con mes por bodegas con renta fija, aunque gran parte del espacio se encuentre vacío. Lo que a simple vista parece un gasto necesario, en realidad es un costo oculto que limita la rentabilidad y la capacidad de crecimiento.
El problema del subuso logístico
Cuando una empresa renta un almacén fijo, lo hace pensando en cubrir temporadas altas, expansión futura o para no correr riesgos de quedarse sin espacio. Pero en la práctica, el flujo de inventario varía: hay meses con picos de demanda y otros con baja rotación.
El resultado: durante gran parte del año, la empresa paga por metros cuadrados que no usa, generando un gasto silencioso que impacta directamente en sus márgenes.
¿Cuánto cuesta realmente un almacén vacío?
El costo no es solo el arrendamiento. Incluye también:
- Servicios y mantenimiento.
- Seguridad y personal operativo.
- Seguros e impuestos asociados.
- Tiempo de gestión y administración.
Todo esto se paga aunque el almacén esté medio vacío. Y lo más importante: es dinero que no se traduce en productividad, pudiendo invertirse en innovación, expansión comercial o crecimiento de ventas.
La solución: almacenaje bajo demanda
Aquí es donde entra el modelo de almacenaje flexible de Cargo B2B. En lugar de atarse a un contrato fijo, las empresas pueden:
- Pagar solo por el espacio que usan.
- Escalar o reducir su capacidad de acuerdo con la demanda.
- Acceder a una red de almacenes estratégicamente ubicados en México.
- Eliminar gastos innecesarios y transformar el costo fijo en variable.
Con Cargo B2B, tu operación logística se adapta a tu negocio, no al revés. Dejas de pagar por metros cuadrados vacíos y conviertes cada peso en un recurso productivo. Si tu empresa busca optimizar costos y ganar flexibilidad, agenda una llamada con un asesor de Cargo B2B y descubre cómo un modelo de almacenaje bajo demanda en México puede transformar tu logística.